En la actualidad, las pinturas vinílicas y acrílicas son las que tienen una mayor representación en el porcentaje de ventas en las compañías latinoamericanas, por eso esbozaremos con expertos del área lo que es el presente de este importante segmento de la industria. por Santiago Jaramillo H.
El volumen de ventas, en lo que se refiere a recubrimientos, es dominado en el mercado mundial por el segmento de pinturas vinílicas y acrílicas, y más si hablamos de América Latina específicamente. Según nuestros invitados para la presente edición de la revista INPRA LATINA, se estima que éste, dependiendo el país o el área geográfica, representa entre un 50 y un 70% del tamaño total del mercado.
Así, lo advierte el ingeniero Juan J. Caprari, investigador del Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología de Pinturas (CIC-Conicet), que tiene su sede en Argentina, “el mercado de estas pinturas es, por lejos, el de mayor volumen mundial. El principal nicho se encuentra en las pinturas de hogar y obra, ya que estos productos afectan todos los órdenes de la vida diaria y contribuyen al confort en el hogar, los lugares de trabajo o el ambiente general de una ciudad”.
De la misma manera, Caprari indica que “se debe tener en cuenta que es extensa la lista de productos para diferentes usos (…). Así, es posible obtener pinturas para exterior, impermeabilizantes para muros, membranas líquidas para techados de cemento o de metal, 'stains' para maderas, barnices anti-esflorescencias para ladrillos vista, pinturas para el pintado del aluminio y del acero galvanizado, convertidores de óxido y la introducción lenta pero segura de los productos anticorrosivos y de terminación (hidroesmaltes), que reemplazarán en un futuro no muy lejano a los tradicionales productos de base solvente”, enfatizó.
Entre tanto, el ingeniero Edison Acosta, director del Departamento Técnico de la compañía ecuatoriana Pinturas Cóndor S.A., aseguró que “en América Latina la producción de pinturas vinílicas y acrílicas está en un nivel muy alto que puede superar el 50% de la producción total de pinturas. El principal uso está enfocado a la industria de la construcción en recubrimientos para viviendas tanto en exteriores como en interiores”.
Por su parte, Jorge Londoño, gerente técnico de la compañía colombiana Global de Pinturas S.A., indicó que el tamaño general de este segmento “está en el orden del 70% del mercado decorativo, tanto para interior como para exterior”, destacó.
Ventajas y desventajas
Como lo aclaró el ingeniero Caprari, a las resinas vinílicas o acrílicas se les denomina comúnmente pinturas en emulsión, cuando en realidad no lo son. Estas resinas no se emulsionan sino que se dispersan en agua. La expresión 'emulsión vinílica' o 'emulsión acrílica', por consiguiente, es errónea, ya que este tipo de materiales son dispersiones acuosas de partículas sólidas de un material sintético. Al estado de pintura líquida, son productos de consistencia fluida, más o menos viscosos. No son emulsiones sino dispersiones.
La expresión pintura en emulsión, proviene del método de obtención de estas resinas sintéticas que en general es el proceso denominado 'polimerización en emulsión' que da como resultado final una dispersión de partículas microscópicas en agua.
Así mismo, Caprari resaltó que “se pueden encontrar dispersiones de resinas acrílicas puras, de gran flexibilidad, adecuada elasticidad y dureza, y de buena resistencia al envejecimiento y al amarillamiento en interiores. Sin embargo, su elevado costo ha determinado que se le emplee solo en revestimientos de alta performance. En los mercados de gran consumo, las mismas se han reemplazado por modificaciones químicas llamadas copolímeros. La resina resultante combina las bondades equilibradas de los polímeros reaccionantes. Se tiene así copolímeros vinil-acrílicos, acrílicos estirénicos, vinil veova, etcétera”.
Igualmente, este representante de la industria argentina recalcó que “en Latinoamérica se pueden encontrar, de acuerdo con los diferentes países, distintos tipos de dispersiones acrílicas, las que muchas veces han sido impuestas en cada lugar por la preferencia de los formuladores, la imposición del tipo de resina por los productores locales o simplemente por el costo de la dispersión. En lo que es de mi conocimiento, en países como Brasil o Perú, la costumbre es formular en mayor medida con resina vinil acrílicas, ya que el pH ligeramente ácido y su reconocida interacción con los espesantes celulósicos y pigmentos naturales ligeramente alcalinos aseguran, en algunos casos, una mayor estabilidad en el envase de los productos. Se obtienen pinturas de adecuada elasticidad, de buena adhesión a sustratos porosos (cemento, madera, aglomerados) y no porosos (aluminio, acero galvanizado), pero de menor dureza. Tienen un ligero 'tacking' residual que aumenta su tendencia al ensuciamiento”.
Argentina, en cambio, como indica Caprari “es un fuerte consumidor de resinas acrílicas estirénicas, basado principalmente en el hecho del poder ligante superior de estas sobre las vinil-acrílicas, lo que permite formular pinturas de mayor contenido de sólidos con excelente comportamiento al envejecimiento, de buena dureza y gran resistencia al frote en húmedo. Tiene menor tendencia al ensuciamiento pues no deja 'tack' residual una vez endurecida. Por último, las vinil veova son resinas de altas prestaciones, muy adherentes, de buena elasticidad, aunque con tendencia a la retención de polvo. En revestimiento expuesto a los agentes climáticos pueden considerarse 'auto lavables'”.
Regulación, un tema de responsabilidad
En la zona latinoamericana no existe una reglamentación unificada sobre el uso de pinturas vinílicas y acrílicas, lo que sí se da es que en cada país existen diferentes entes que se encargan de la elaboración de normas locales que regulan la elaboración y uso de este tipo de pinturas.
Edison Acosta indica que en Ecuador, por ejemplo, “existe el Instituto Ecuatoriano de Normalización (INEN), que es el organismo que emite la norma de pinturas arquitectónicas NTE-1544, pero no diferencia el uso de pinturas vinil-acrílicas o acrílicas y más bien lo que ha establecido es una clasificación, de acuerdo con ciertas características técnicas con las cuales se hace una discriminación entre pinturas para interiores y pinturas para exteriores. Con este antecedente, el INEN puede certificar, por solicitud de los fabricantes, el cumplimiento de la norma para cada tipo de pintura que sea requerido”, destacó.
Como lo reconoce Caprari, de la misma manera funciona en Argentina, donde “hay al menos dos entes encargados de regular sobre estos tipos de pinturas. Uno es el Ministerio de Salud, que dicta normativas de componentes potencialmente peligrosos, por ejemplo el contenido de plomo en pinturas, a través de la Dirección Nacional de Determinantes de Salud e Investigación, y otro es el IRAM (Instituto Argentino de Racionalización de Materiales), que dicta las normas que deben cumplir las diferentes pinturas en función del tipo de servicio (interior, exterior, impermeabilizantes, etc.) para la que deben ser formuladas. En Europa, lo establece la Comisión Europea de Protección del Medio Ambiente, mientras que en Estados Unidos las normativas provienen, en casi todos los casos, de las Comisiones Estatales”.
Igual ocurre en el caso colombiano, donde, según Jorge Londoño, “rige la Norma Técnica Colombiana (NTC) 1335”.
Principales novedades
De acuerdo al criterio de Edison Acosta es muy común por estos días encontrar pinturas a base de resinas acrílicas modificadas con estireno para alta resistencia a la alcalinidad, promotores de adherencia para sellantes e inclusive pinturas de tráfico, acrílicos elastoméricos usados en la elaboración de impermeabilizantes, etc. “Cada vez la especialización es más amplia y existe una gran cantidad de posibilidades para obtener propiedades específicas en cada producto. Las resinas acrílicas han tenido cambios tecnológicos que actualmente han permitido desarrollar nuevas líneas de usos como esmaltes acuosos de alto brillo y primers anticorrosivos para uso industrial -sistemas de alta resistencia al agua-”.
En lo referente a los cambios o novedades, el ingeniero Caprari, aseguró que “el principal cambio no se ha producido en el campo de las resinas propiamente dicho. Si bien considero que la aparición de las resinas estructuradas es un gran avance hacia la obtención de revestimientos resistentes y 'amigables' con el medio ambiente. Es así que en primera instancia se obtuvieron los polímeros de núcleo rígido y coraza elastomérica, donde el material se comporta como un elastómero reforzado, al de núcleo elastomérico y coraza rígida, que hace que la resina se comporte como un plástico de alta dureza. En el primer caso, pinturas protectoras de alta performance para una gran variedad de aplicaciones y en el segundo, un revestimiento de alta resistencia a la transitabilidad”, subrayó.
Por su parte, el representante de la compañía colombiana Global de Pinturas S.A., destacó que el principal cambio que se han presentado es que “se ha pasado gradualmente de ligantes vinílicos a vinilacrílicos y a los acrílicos”.
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