Internacional. La investigación muestra que una película delgada de celulosa puede inactivar el virus SARS-CoV-2 en cuestión de minutos, inhibir el crecimiento de bacterias, incluida la E. coli, y mitigar la transferencia de patógenos por contacto.
El recubrimiento consta de una película delgada de fibra de celulosa que es invisible a simple vista y es resistente a la abrasión en condiciones secas, lo que lo hace adecuado para su uso en objetos de alto tráfico, como manijas de puertas y pasamanos.
Si bien los desinfectantes químicos convencionales y los diseños de superficies antivirales se enfocan en las proteínas estructurales o los ácidos nucleicos, los investigadores, dirigidos por el profesor Zhenyu Jason Zhang, de la Escuela de Ingeniería Química de Birmingham, se enfocaron en secar las gotas respiratorias que contienen los virus por la fuerza capilar introducida. por la estructura porosa.
Se sabe que el virus COVID-19 permanece activo durante varios días en superficies como el plástico y el acero inoxidable, pero solo durante unas pocas horas en el periódico.
El equipo, que tiene experiencia en química de superficies e ingeniería de formulación, investigó la estructura y el rendimiento de un recubrimiento hecho de celulosa microfibrilada (MFC) proporcionada por FiberLean Technologies, un productor de MFC para la industria del papel y el embalaje.
Los investigadores encontraron que la naturaleza porosa de la película juega un papel importante. Acelera la tasa de evaporación de las gotas de líquido e introduce una presión osmótica desequilibrada a través de la membrana bacteriana.
El recubrimiento fue desarrollado por equipos científicos de la Universidad de Birmingham, la Universidad de Cambridge y FiberLean Technologies, quienes trabajaron en un proyecto financiado por el Consejo de Investigación de Ingeniería y Ciencias Físicas para formular tratamientos para superficies de vidrio, metal o laminados que brindarían una larga duración. protección contra el virus COVID-19.
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